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marii

Marii

Marii
La Osada
Clase:
Guerrero
Raza:
Elfo
Género:
Femenino
Nacimiento:
1899
Fallecimiento:

Lealtad:
Renegada
Relacionados:
Mezk (Amiga) - Ahzin (Amiga)

Descripción física y personalidad

Marii es una elfa de tez blanca, cabello corto y lacio, de color negro. Su altura está por encima de la mayoría de los humanos, pero sus brazos y piernas son ambas igual de delgadas. Su estatura está en 1.82 metros y su peso en 64 kilogramos. A pesar de sus carencias físicas, desendiente de su propia raza, es totalmente capaz de portar sus gruesas y pesadas armaduras, junto a su confiable escudo azul y blanco, sin olvidar a su espada. Tiene ojos color negro, nariz respingada, y orejas largas y puntiagudas. Es una apasionada por la batalla; disfruta estar frente al enemigo en la vanguardia, defendiendo a su equipo, como mercenaria, o como anteriormente, defendiendo su patria. Su pasamiento es estar en la ciudad, interactuando con sus más fieles amigos. Le gusta beber vino luego de sus arduas batallas, acompañado de una voluminosa chuleta. No teme enfrentarse a los más complicados adversarios y a las más temibles criaturas. Es carismática y leal, además de amigable y honrada.

Inicios de una guerra

Nacida de dos elfos en 1881, en la ciudad de Banderbill, bajo la protección de sus murallas y su propia familia. Una elfa de raza pura, que ha tenido una vida apaciguada y poco osada. Marii ha sido, desde pequeña, instruida en el arte de la magia, en la cual, no tenía maestría al igual que su madre. Su madre era una reconocida maga retirada de las filas de La Sagrada Orden. Su padre era un simple aventurero que se ganaba la vida matando criaturas viles de nivel intermedio y cumpliendo misiones, en las cercanías de Banderbill. A la edad de 6 años, a Marii se le entregó su primera daga, con la cual, todo comenzó. Empezó a jugar con ella en su casa, lanzando ataques y cortes al aire. Su madre, feliz, pensó que su pequeña se convertiría en una excelente Paladín y entraría a reemplazarla. Cumplidos sus 8 años, Marii fue a su padre a combatir fuera de las murallas; fue la primera vez que salió de la protección de su ciudad. Mató sin dificultad ni piedad a tres murciélagos, lo que provocó las felicitaciones y el asombro de su padre; y también, el inicio de una guerrera.

El primer viaje

A la edad de 12 años, Marii ya se había convertido en una elfa intrépida. Realizaba misiones de similar complejidad que las de su padre, portando tan solo una espada corta y una rodela. Su control con la espada era perfecto. Enfrentaba criaturas que no lograban siquiera gastarle pociones. Su madre se angustiaba, porque Marii no podía usar magia, difícilmente podría convertirse en una Paladín como ella esperaba. Su mayor reto se había presentado cuando debió encargarse de una criatura que jamás había visto: un fango. Esta criatura, desagradable en apariencia pero con fuerza sobrehumana, fue todo un reto para ella el cual aceptó con valor sonriendo fervientemente. Vigorosa, se alejó de su ciudad natal en busca de aquella espantosa criatura. Sin detener su ansioso andar, siguió adentrándose en el bosque, donde el fango había sido avistado; el cual localizó rápidamente. Era enorme, más alto que ella, y su hedor era horrible. Sin embargo, valientemente combatió contra la criatura en un arduo combate, resultando victoriosa. Había sido la primera vez que consiguieron agotarla. Soltó su equipamiento y cayó de espaldas al suelo, respirando agitadamente, con una maravillosa sonrisa de satisfacción. Al cumplir sus 16 años abandonó su casa con el objetivo de visitar otras ciudades. Para ese momento, Marii ya dominaba todo tipo de artes con la espada y su fuerza era superior a casi todos los elfos, entre ellos, los más fuertes Paladines. Viajó hasta el Fuerte Ullathorphe. Campamento neutral con aire de guerra; Marii estaba preparada para cualquier combate. Dirigiéndose al oeste de la ciudad, puedo toparse con una inmensa cantidad de zombies que no fueron un reto para ella. La situación se agravó cuando se encontró con un enano que se encontraba luchando contra los zombies, al cual, ingenuamente saludó. El enano atacó a traición a Marii, hiriéndola de gravedad, la fuerza del enano era increíble. Supo que en ese instante que era matar o morir. Luchó con aquel sujeto, resultando en la separación de la cabeza y su cuerpo provocada por su espada y debido a su destreza y control de la batalla. A diferencia del enano que lanzaba cortes al azar. No sintió nada, rencor, alegría, tristeza, remordimiento, nada. Su espada estaba manchada por la sangre de otra persona, fue su primer asesinato.

Escandalosa Osadía

En el año 1925 (o 1316 D.bA), Marii tendría 26 años, siendo ya una experta en el combate, habiendo cruzado por los mares feroces del continente, por los intensos fríos y furiosas nevadas de Tiama y el dichoso Dungeon Cristal, los abrasantes calores y actividad volcánica del Dungeon Zero y el laberinto del Templo Kalath. Se convirtió en una guerrera totalmente capaz, lo cual es muy raro dentro de su raza. Aunque muchos han criticado su decisión, ella prefiere decidirlo con la espada más que diplomáticamente. Actualmente, es una Renegeda independiente. Pero, a lo largo de su vida, pasó por las filas de las Hordas del Caos y la Legión Dorada; además, por los clanes Exue y Carpe Diem. Ahora mismo, disfruta pacíficamente su día a día en Rinkel Comercial, junto a sus compañeros. Su vestimenta insignia actualmente es una Corona dorada impregnada con gemas, heredada de su madre, que en paz descanse, una armadura de dragón negro, que ella misma asesinó, un escudo de torre, con rasguños claros de sus batallas, y una Harbinger king, espada que porta con orgullo y pesadez desde hace tres años. Se desconoce su meta en la vida, nunca nadie ha sabido qué es lo que su mente retorcida se encuentra, pero una cosa sí es segura, es una luchadora que ha demostrado sus habilidades en el campo de batalla incontables veces.

marii.txt · Última modificación: 2020/04/11 23:25 por jherinek